Reflexiones

Te das cuenta cuando es demasiado tarde. Y es porque el instinto humano sólo se para a pensar aquello que ya dejó ir. ¿Porque? ¿Porque no nos damos cuenta de lo que tenemos? Estamos tan sumidos en disfrutar el momento, el ahora que perdemos los detalles. Sólo echamos de menos lo que tuvimos, y si lo tuvimos porque lo dejamos escapar?
Las cosas que tanto nos costaron conseguir las dejamos marchar en un rápido pestañeo. Todo es tan efímero, tan volátil… que me asusta. Me asusta con la fragilidad que todo se puede echar a perder. Por qué dejamos ir las cosas importantes, esas que tanto soñamos con tener. Como en el amor, puede llegar a ser tan intenso que asusta. Y al asustamos lo perdemos… Es complicado, todo es complicado cuando lo dejamos ir... Es entonces cuando ya no hay marcha atrás, cuando no podemos retroceder y volver a saborear esa sensación, la grandiosidad de ese momento.
Somos personas frágiles hechas de instantes aún más frágiles.

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