Quizás


Con el tiempo he ido coleccionando nombres en una caja, con algún que otro recuerdo roto. Y a medida que crezco, solo hace que crecer y crecer haciéndome difusas las caras con sus respectivos nombres. A la vez, haciéndome descreer en la ilusión barata de conectar con alguien.
Y entre tantos nombres me acordé del tuyo. Quizás porque fui tuya sin tenerte, quizás porque me tuviste sin quererlo, quizás. Porque sin llegar a tener nada me hiciste sentir que éramos algo. Solo fantasmas en mi cabeza que susurraban tu nombre. Quizás fue el misterio de no llegar a conocerte realmente, no lo se. Nunca lo sabré, pero me hiciste vivir. Sonrojarme, ponerme nerviosa, volverme indecisa, sentirme vulnerable. Quizás porque nunca te interesé. Y mira que lo intenté; desde tacones de quince cm y rímel en las pestañas hasta sudadera y coleta desaliñada. Nada funcionó. Nada.
Y entre tantos nombres, desamores y puñaladas traperas tu estarás siempre el primero. Porque me rendiría a tus pies a las dos milésimas de segundo. Anonadada, trastornada, entregada. Quizás porque luché por una causa perdida, y pese a no ser nada, me demostraste lo contrario. Quizás solo son fantasmas en mi cabeza que nunca se callan.
Quizás sea la indecisión de no saber nada, de dejarme confusa, lo que me deja sin respuesta de si no fuimos nada por cobardía o por falta de sentimiento.


No hay comentarios: